Final con sello brasileño

Diriangén se impuso (1-0) ante una combativa UNAN Managua, en un cierre lleno de emociones.

El decano del balompié nacional volvió a celebrar un encuentro con horario nocturno en el Estadio Cacique Diriangén, condición de la que se habían visto privados miles de aficionados, mismos que salieron con una notable sonrisa luego de la jornada 13.

La primera parte presentó un desarrollo parejo y con una media cancha arduamente disputada. Los visitantes supieron cómo ser un rival incómodo y tácticamente aplicado, por su parte, Diriangén padecía de un efecto embudo en sus ataques, factor que le nubló sus caminos hacia el gol hasta que Maurcio Cruz realizó las variantes correspondientes.

Primero, al reposicionar al juvenil Bryan Román y posteriormente con el ingreso de Víctor Parrales y el juvenil Misael Álvarez, proporcionando la frescura y movilidad que necesitaba el ataque local. Diriangén insistió a la puerta rival, pero sin mostrar la capacidad ofensiva que colocan como la segunda mejor ofensiva del torneo, con 30 goles.

En el cierre del compromiso los capitalinos parecían más que conformes con sacar un punto en su visita a Diriamba, pero el Cacique jamás soltó su lanza, mantuvo su enfoque y arrinconó a su presa contra el abismo del descenso.

En el epílogo del encuentro fue invalidado una anotación de Luis Coronel que de cabeza había incrustado el balón en el ángulo superior derecho de Diedrich Téllez. El peligro se podía respirar en el ambiente y como si la jugada anterior fuera un presagio del final, apareció un servicio magistral de Víctor Parrales, que encontró a Pedro Dos Santos realizando un desmarque de centro delantero y terminó definiéndolo como tal, enviando de cabeza al fondo de las redes el balón (92`) con el que Diriangén suma su séptima victoria del torneo y descuenta puntos a Managua FC por la clasificación a semifinales.